Marketing para eventos y comunicación online

 

Un evento es una actividad de marketing o relaciones públicas que sirve, entre otras cuestiones, para proyectar a la sociedad una determinada imagen
de la entidad que lo promueve, lo que incluye no sólo a la propia organización en sí, sino a los productos o servicios que vende o presta.

Un evento, como un congreso, una jornada, una exposición, un concurso, una conferencia, una presentación, fiesta, etc., puede durar unas pocas horas, acaso ni una. Si sale bien, sus efectos positivos en términos de prestigio serán constatables y efectivos por mucho tiempo. Del mismo modo, si el evento resulta un desastre, puede echar por tierra en minutos el prestigio alcanzado a lo largo de toda una trayectoria de trabajo y esfuerzo.

Pero aún hay más: si una pequeña parte del evento falla puede contagiar al resto por muy bien que haya salido. Si el autobús que recoge a los congresistas no es puntual o no reúne las características adecuadas, si la sopa de la cena de clausura tiene un gusto horrible, si los músicos que van a amenizar desafinan más que tocan, si falla el aire acondicionado o la megafonía, o si se forma un guirigay a la hora de las acreditaciones se hablará de eso en términos negativos mucho más que de cualquier otra cosa.

En e.com llamamos a esto la crisis del rotulador. Hace años, en uno de nuestros primeros congresos, recibíamos a más de setecientos congresistas y cien ponentes en varias sedes de forma simultánea. En una de las salas faltaba un rotulador de esos que escriben en las pizarras blancas y a pesar de que el resto del evento funcionó al milímetro, el cliente nos recriminó lo del rotulador con una bronca monumental. No sé si era para tanto en realidad, pero ahora con el tiempo agradecemos a aquel cliente (clienta en realidad) aquella reacción.

Desde entonces incorporamos a nuestra filosofía que en un evento no puede ni debe fallar nada, aunque sea un simple rotulador.

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